El Doctor Administrador 1.

En este ejercicio, caros conciudadanos, se refleja impoluta la divina esencia de la democracia, que es, a todas luces, La Virtud misma hecha comunidad.
Y es que el pueblo, representado por este acto sublime del sufragio, alzará como otras veces su voz poderosa de patriota, su vos sabia de ciudadano, su vos amorosa de padre de familia y nos revelará como en una epifanía salvadora los designios de la divina voluntad pues es bien sabido que: "vox populi, vox dei", la voz del pueblo es la voz de Dios.
A través  de este sencillo mecanismo, el del voto, la implacable justicia de las mayorías ha de revelarnos la Verdad, como un cívico Delfos, como una democrática Sibila; y ha de guiarnos e iluminarnos en la senda que debemos recorrer, la senda de la justicia y la libertad, la senda de la civilización.
Así que, sin más preámbulos queridos copropietarios de este, nuestro edificio "Lucerito", que digo copropietarios, hermanos ante dios y la ley, procedamos a votar en esta asamblea para impedir ese injusto aumento salarial que alguna desinformada minoría propone en favor de porteros, vigilantes, aseadoras y demás empleados de nuestro amado edificio.

Discurso del "Doctor" Jorge E. Ramirez Gonzalez, Abogado de oficio y administrador encargado de la copropiedad, en ocasión de la trigésimo segunda asamblea general de copropietarios del edificio "Lucerito". El 25 de Agosto del año en curso.